La Defensoría del Pueblo de Ecuador, en el marco de la conmemoración de la “Declaración Universal de los Derechos Humanos” que se celebra el 10 de diciembre de cada año, se ha propuesto emprender acciones coordinadas con diversos grupos de atención prioritaria y colectivos con potenciales riesgos de vulneración de sus derechos, con el objetivo principal de fortalecer el trabajo desarrollado en los últimos años.
Para ello, se realizaron reuniones preliminares en las que se analizaron las necesidades y dificultades que tienen para alcanzar el pleno ejercicio de sus derechos los familiares de personas desaparecidas y de víctimas de graves violaciones de Derechos Humanos; personas afroecuatorianas; con enfermedades raras, poco frecuentes, huérfanas y catastróficas; LGBTI; adultas mayores y de igualdad y libertad religiosa, consumidores y usuarios y personas viviendo con VIH/SIDA.
Las conclusiones y resultados de estas jornadas se examinaron este 9 de diciembre en el Centro de Convenciones Eugenio Espejo en Quito, en donde los representantes de los diferentes colectivos participaron en mesas de trabajo conjuntas divididas en dos paneles para definir una agenda a corto, mediano y largo plazo.
En este espacio de diálogo los representantes de los colectivos aseguraron que este tipo de iniciativas les permiten exponer sus principales problemas y los requerimientos que tienen frente al Estado y la sociedad en general.
En el taller se explicó con mayor detalle el proceso propuesto, así también, se evaluó las actividades y acciones impulsadas con el propósito de identificar y consensuar los temas de mayor interés y preocupación para trabajar a futuro mediante la construcción de un Plan de acción integral, en el que la Defensoría del Pueblo se comprometió a acompañar y apoyar.
Al finalizar el evento se elaboró una declaración conjunta enfocada en la vigencia y garantía de sus derechos, tomando en cuenta las necesidades especiales de cada colectivo.
El Defensor del Pueblo (e), Patricio Benalcázar, previo a suscribir la Declaración con colectivos explicó la importancia de este trabajo conjunto y reiteró el compromiso de la Defensoría del Pueblo de Ecuador de apoyar este tipo de procesos que buscan la tutela de derechos.
“El objetivo es reivindicar los derechos de todos los colectivos y articular relaciones. Que la firma de esta Declaración sea para caminar en lo concreto pero trabajando en conjunto, no de forma individual. Las puertas de la Defensoría del Pueblo siempre estarán abiertas al diálogo”, afirmó Benalcázar.
Por su parte, los representantes de los colectivos expresaron su agradecimiento a la Institución Nacional de Derechos Humanos y solicitaron un acompañamiento continuo, al igual que su apoyo en la incidencia en políticas públicas a favor de esto grupos de atención prioritaria.
La Declaración por la Diversidad -como se ha denominado a este documento que reúne las principales peticiones de los colectivos- se suscribió con el compromiso de todas y todos de trabajar por un país más solidario e inclusivo.
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