La Defensoría del Pueblo presentó medidas cautelares ante la Corte para proteger el derecho a la salud de un niño de dos años de edad, quien ingresó al hospital para la extracción de una hernia umbilical pero lamentablemente su condición medica empeoró requiriendo un especialista para atender su caso.
Ximena A., madre del niño presentó una denuncia ante la Coordinación General Defensorial Zonal 6 en Cuenca, para que se precautele el derecho a la salud de su hijo quien requería un especialista neuropediatra debido al cuadro presentado por el paciente; esto en virtud de que el hospital no contaban con un médico de dichas características.
La peticionaria manifestó que su hijo ingresó al hospital Santa Inés para realizarse una operación de hernia umbilical, sin embargo cuando el niño ya se encontraba en la sala de recuperación presentó varios signos de malestar. Al poner en conocimiento del personal médico, le manifestaron que dichas reacciones eran normales, pero después de 15 minutos que se acercaron a realizarle los chequeos de rigor se dieron cuenta que el paciente se encontraba en situación de riesgo, denominada código azul, y buscaron oxígeno pues los aparatos que tenían a la mano se encontraban dañados. Durante esta situación el niño sufrió un paro respiratorio y posterior a ello un paro cardiaco, motivo por el cual fue resucitado.
El niño, quien se encontraba con pronóstico reservado necesitaba de un especialista en neuropediatría que pueda atender su caso, pero el hospital manifestó que no cuentan con ese tipo de médicos, así que recurrieron a un galeno externo, el mismo que revisó al niño y luego de remitirle una serie de exámenes no regresó al hospital a pesar de la insistencia de los familiares, por lo que la madre tuvo que buscar un nuevo médico, tarea que le correspondía al hospital directamente.
La madre desesperada por la condición de su hijo y con temor de la repetición de un episodio como el anterior, solicitó la intervención de la Defensoría del Pueblo. Es así que el Coordinador Zonal 6, Jorge Valdivieso presentó medidas cautelares a favor del niño y en contra del hospital solicitando al juez exija a la casa de salud efectuar las acciones oportunas y pertinentes a fin de contar con un especialista con las características que el niño requería para que le brinde atención contínua, precautelando de esta manera los derechos que le corresponden al tratarse de una persona perteneciente a un grupo de atención prioritaria.»
El juez aceptó la medida presentada por la Defensoría del Pueblo, tomó contacto con las autoridades de salud y ordenó al hospital Santa Inés que realicen los procesos necesarios para garantizar que el niño sea atendido con los especialistas que requiera y de la manera más urgente posible, pues no solo se habían vulnerado sus derechos, sino que su vida estaba en peligro.
El hospital Santa Inés dio paso a la orden del juez y el niño pudo ser atendido como corresponde, tutelando así su derecho a la salud y a contar con una vida digna, tras la intervención defensorial.