Este 25 de mayo de 2016, la Defensoría del Pueblo y la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) suscribieron dos cartas de entendimiento en la ciudad de Quito. La primera, enfocada en establecer el marco de cooperación interinstitucional en el contexto de la emergencia suscitada por el terremoto del pasado 16 de abril y la segunda, en mejorar la situación de derechos humanos de las personas que se encuentran en contextos de movilidad, con énfasis en personas refugiadas y solicitantes de asilo.
Las cartas fueron suscritas por el Defensor del Pueblo, Ramiro Rivadenerira Silva y la representante de Acnur en Ecuador, María Clara Martín; quienes se comprometieron a continuar trabajando juntos en beneficio de la ciudadanía.
Entre las acciones que realizarán en las zonas de desastre están: planificar y ejecutar brigadas de monitoreo e intervención en albergues y campamentos, colaborar e intercambiar información necesaria para el cumplimiento de compromisos y brindarse apoyo técnico. Esto con el fin de proteger especialmente a personas de grupos de atención prioritaria (niños, niñas, adolescentes, adultos mayores y personas con discapacidad), personas afrodescendientes, orientaciones sexuales diversas y personas con VIH. De la misma forma se busca prevenir todo tipo de violencia sexual y de género, identificar necesidades y vacíos de protección y fortalecer mecanismos de respuesta.
Sobre la situación de las personas en movilidad humana, la Defensoría del Pueblo reafirmó su contribución en la protección y tutela de derechos a través de asesoría y orientación legal, investigaciones y acciones defensoriales, gestiones oficiosas y vigilancias del debido proceso. Además, continuará con su labor de promoción de derechos mediante la difusión, sensibilización, capacitación y formación.