El cantón Carlos Julio Arosemena Tola, ubicado al sur de la provincia de Napo, fue la sede de los “Diálogos ciudadanos por la defensa de los derechos”, encuentro efectuado en dicha provincia amazónica, donde la ciudadanía fue enfática al denunciar que desde hace más de 20 años, compañías extranjeras obtuvieron concesiones mineras en varias comunidades de dicho cantón, ocasionando un impacto ambiental de incalculables consecuencias, tierras devastadas y sin un proceso de remediación ambiental, que ha afectado directamente la economía y el desarrollo del plan de vida de sus habitantes.
Fue Édgar Jiménez, presidente de la asamblea rural comunitaria del cantón Carlos Julio Arosemena Tola y presidente de la comunidad ILA, quien dio la bienvenida al Defensor del Pueblo de Ecuador, Dr. Freddy Carrión Intriago, e indicó que “la minería afecta a toda la población porque nuestros ríos están contaminados. Hemos dicho no a la minería, pero es una lucha desigual que lleva años».
Huayra Alvarado -representante de la comunidad Zawata- señaló la negativa de la población ante la minería a gran y pequeña escala. De igual manera, Wilter Estrada, representante de la asamblea cantonal de Arosemena Tola, exhaltó que «es grato ver a una autoridad que se pone las botas y recorre para constatar la contaminación minera en nuestro propio territorio».
Gonzalo Tapuy, de la comunidad Misi Urku, resaltó que «nuestros ríos y esteros están contaminados y ya no podemos pescar ni bañarnos. Lucharemos por ver nuestras aguas cristalinas, porque nuestras hijas e hijos tengan donde sembrar y tomar agua pura». Además, Tapuy felicitó al Defensor del Pueblo por “no ser una autoridad de escritorio y venir a nuestra comunidad para ver, vivir y palpar nuestra realidad”.
Violeta Pulataxi, secretaria técnica del consejo de defensores/as de los derechos humanos y de la naturaleza en Napo, resaltó que los “diálogos ciudadanos” son un proyecto importante «para abordar las problemáticas de parte de la Defensoría del Pueblo junto a nosotras, constatando la afectación que sufre la Amazonía a causa de la minería”, acotó. En tanto, el presidente del GAD parroquial de Talag, Wilson Licuy, subrayó que “le decimos no a la minería y toda la población está vigilante para impedir que entre a nuestro territorio. Napo ama a la vida y no a la minería”, concluyó.
En su intervención, el representante de organizaciones sociales de dicho sector, José Moreno, agradeció al Defensor del Pueblo por poner en primer plano la vida. “Su visita nos da esperanza en esta lucha contra este “gran monstruo”. Es preciso que se dé la consulta previa libre e informada, ya que las empresas mineras están solicitando 7.125 hectáreas más para ser explotadas. Por ello, pedimos a la Defensoría del Pueblo trasladar nuestro mensaje de NO a la minería”, concluyó.
El titular de la Institución Nacional de Derechos Humanos, ante la exposición de casos de vulneración de derechos humanos y de la naturaleza por motivo de la explotación minera, señaló que “es doloroso ver la destrucción de nuestra naturaleza. Los daños provocados por la minería de cielo abierto son irreversibles. Por tanto, como Defensoría del Pueblo vamos a exigir que se pongan en marcha los proyectos de remediación que recuperen las tierras y ríos afectados. Además, exigiremos a las autoridades para que actúen en defensa de los derechos humanos y de la naturaleza», enfatizó el Dr. Freddy Carrión Intriago.